Ante la cambiante economía global, el plan de negocio se torna fundamental para la toma de decisiones, la complejidad y la incertidumbre del entorno actual han llevado a que las empresas emprendieran procesos de cambio para hacerles frente. Cualquier intento de bosquejar un diseño de un sistema sin disponer de un método sistémico tiene pocas probabilidades de éxito. Solamente con una metodología clara que permita hacer comprender su tarea a cada uno de los integrantes y coordinar todas entre sí, es posible obtener buenos resultados. Cada proceso debe atender a la naturaleza sistémica del cambio organizacional, recordando que una modificación en uno de los elementos puede afectar el comportamiento de otros. El diseño permite a las organizaciones generar estructuras y procesos nuevos, en función de las exigencias del contexto y de las estrategias. En consecuencia, implica la forma en que se administraran las transiciones de las organizaciones para pasar de los estados actuales a los futuros.